Si pudiera,
amaría hasta cuando sueño,
volaría incluso entre el tiempo,
correría descalzo entre los recuerdos,
me tumbaría a ojos cerrados
en los amplios campos del silencio.
Si pudiera,
negaría a mi instinto
la experiencia de la soledad,
mojaría de amaneceres
que explotan en luz, mi camino,
pediría al destino un poco más de eso,
que me da la vida
cuando recién mojada la tierra, aspiro.
Si pudiera,
llenaría el mundo por donde voy
de blancos tulipanes,
rosas multicolor y claveles morados,
para que los amargos sinsabores
duelan menos,
se curen más pronto
y no nos soltemos de la vida.
Si pudiera,
daría en un bocado
todo el amor que le hizo falta a quien nos crio,
porque muchos caminamos
atravesando este mundo
con el hambre de ese amor,
que no estaba en aquella alacena emocional
para alimentarnos.
Si pudiera…